El despido disciplinario, consagrado en el Estatuto de los Trabajadores (ET) como una de las medidas más severas a disposición del empleador, implica la extinción unilateral del contrato de trabajo por un incumplimiento grave y culpable del trabajador.

En este artículo, nos adentraremos en un análisis profundo de cinco ejemplos de despidos disciplinarios en España, examinando cada caso a la luz de la normativa y jurisprudencia vigente, con el objetivo de ofrecer una perspectiva completa y rigurosa sobre esta temática de gran relevancia en el ámbito laboral español.


1. Faltas de Asistencia o Puntualidad Injustificadas

Las faltas de asistencia o puntualidad injustificadas constituyen una de las causas más comunes de despido disciplinario. El ET establece en su artículo 19.1 el deber del trabajador de asistir al trabajo y cumplir con su horario laboral.

Ejemplo: Un trabajador acumula 20 faltas de puntualidad durante un año sin justificación alguna. La empresa, tras enviarle una amonestación por escrito, observa que el trabajador persiste en su conducta, por lo que decide finalmente despedirlo disciplinariamente.

Fundamento legal: Artículo 54.2.d) ET: «Inobservancia grave del trabajador al contrato.»

Jurisprudencia: Sentencia del Tribunal Supremo de 29 de septiembre de 2022 (rec. núm. 402/2021): «Las faltas reiteradas de puntualidad, sin causa justificada, constituyen un incumplimiento grave del trabajador que puede justificar su despido disciplinario.»


2. Indisciplina o Desobediencia

La indisciplina o desobediencia en el trabajo también representan motivos válidos para un despido disciplinario. El trabajador, según el artículo 37.4 ET, debe cumplir con las órdenes e instrucciones del empresario, siempre que estas sean lícitas y razonables.

Ejemplo: Un trabajador se niega rotundamente a realizar una tarea encomendada por su superior, alegando que no forma parte de sus funciones. A pesar de las advertencias del superior, el trabajador mantiene su postura, lo que lleva a la empresa a despedirlo disciplinariamente.

Fundamento legal: Artículo 54.2.d) ET: «Inobservancia grave del trabajador al contrato.»

Jurisprudencia: Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de 10 de marzo de 2023 (rec. núm. 567/2022): «La desobediencia reiterada a las órdenes del empresario, sin causa justificada, constituye un incumplimiento grave del trabajador que puede justificar su despido disciplinario.»


3. Ofensas Graves al Empresario o Compañeros

Las ofensas graves al empresario o compañeros de trabajo, ya sean verbales o físicas, constituyen un motivo de despido disciplinario. El trabajador, tal y como se establece en el artículo 11 ET, debe mantener un comportamiento respetuoso y cordial en el ámbito laboral.

Ejemplo: Un trabajador insulta gravemente a su superior durante una discusión en el trabajo. La empresa, ante la gravedad de la situación, decide despedirlo disciplinariamente.

Fundamento legal: Artículo 54.2.f) ET: «Falta grave de respeto e injurias al empresario o a sus familiares, compañeros de trabajo o a las personas que trabajen en su nombre.»

Jurisprudencia: Sentencia del Tribunal Supremo de 15 de diciembre de 2021 (rec. núm. 123/2020): «Las ofensas graves al empresario o compañeros de trabajo, que alteren gravemente el ambiente de trabajo, constituyen un motivo de despido disciplinario.»


4. Revelación de Secretos Empresariales

La revelación de secretos empresariales, como información confidencial sobre clientes, proveedores o estrategias de la empresa, constituye un motivo de despido disciplinario. El trabajador, según el artículo 55.5) ET, tiene la obligación de guardar secreto sobre la información a la que tiene acceso en el desempeño de su trabajo.

Ejemplo: Un trabajador comparte con un competidor información confidencial sobre la estrategia comercial de la empresa. La empresa, al tener conocimiento de esta grave falta, decide despedirlo disciplinariamente.

Fundamento legal: Artículo 55.5) ET: «Revelación de secretos empresariales.»

Jurisprudencia: Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de 20 de enero de 2022 (rec. núm. 345/2021): «La revelación de secretos empresariales, con perjuicio para la empresa”


5. Disminución Continuada y Voluntaria del Rendimiento

Una disminución continuada y voluntaria del rendimiento del trabajador, sin causa justificada, puede constituir un motivo de despido disciplinario. El trabajador, según el artículo 19.3 ET, está obligado a cumplir con las obligaciones pactadas en su contrato de trabajo, incluyendo el rendimiento esperado.

Ejemplo: Un trabajador experimenta un descenso significativo en su rendimiento durante varios meses, sin que exista ninguna causa justificada para ello. La empresa, tras intentar solucionar la situación mediante amonestaciones y medidas formativas, observa que el trabajador no mejora su rendimiento, por lo que decide despedirlo disciplinariamente.

Fundamento legal: Artículo 54.2.h) ET: «Disminución continuada y voluntaria en el rendimiento en el trabajo.»

Jurisprudencia: Sentencia del Tribunal Supremo de 30 de junio de 2020 (rec. núm. 789/2019): «La disminución continuada y voluntaria del rendimiento del trabajador, sin causa justificada, constituye un incumplimiento grave que puede justificar su despido disciplinario.»


Los ejemplos expuestos en este artículo ofrecen una visión panorámica de las diversas situaciones que pueden derivar en un despido disciplinario en España. Es fundamental recordar que cada caso debe ser analizado de forma individualizada, considerando las circunstancias específicas y la normativa vigente, para determinar si la decisión del empleador es procedente o improcedente.

En Abogados Dagesa, nuestro equipo de expertos legales cuenta con amplia experiencia en materia de despidos disciplinarios. Ofrecemos asesoría personalizada a trabajadores y empresas, velando por la defensa de sus derechos e intereses legítimos en cada caso.

No dude en contactarnos si tiene alguna duda o necesita asistencia legal en relación con un despido disciplinario.

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